viernes, 16 de julio de 2010
Homenaje a la bandera nacional
Audaz y conquistadora
Aventurera y romántica
Amiga de cascos, plumas cortas, espuelas y espadas
Roja como el heroísmo como el rayo sol y gualda
Ética por su belleza
Inmortal por sus batallas
Tela en que todos los vientos
Cantaron glorias a España
Y fue a clavarse en las cimas
Donde reposan las águilas
Sudario del enemigo que audaz osó desgarrarla
Igual que un crespón de luto cobijó a distintas razas
Mientras que guíe en los combates para orgullo de la patria
Colgadura de victorias lienzo agrio cifra santa
Descubridora de mundos
Sintió las vírgenes aguas
Abrirse entre su bravura
En espumosas montañas
En el cristal infinito
Digno espejo de copiarla
Fue mirando su grandeza
Libre, intrépida y gallarda
Todos los cascos de guerra
Tienen señal de sus balas
Y todo acero de lucha tiene mella de sus armas
Con cañones dijo al orbe su epopeya soberana
Que estremecidos oyeron todos los puntos del mapa
Supo todos los caminos
Venció en todas las batallas
Y fue tan alta y tan noble
Que en la lid al tremolarla
Postrado el mundo decía
¿Es la bandera de España?
Y España palpita en ella
Y está su tela labrada con fibras de corazones
Y con jirones del alma
Su amarillo es oro puro
Rojo valor y arrogancia
Y porque encierre más brío
Tiene dos partes de grana
Nuestra tradición sublime
En sus pliegues flota
Y canta y basta digna de ella
Nuestra soberbia Giralda
La bandera simboliza nuestras costumbres bizarras
Nuestras parrandas alegres
Nuestras mujeres amadas
Y el zorcico vibra en ella
Y el gemido de la gaita
Y la jota aragonesa
Y la andaluza guitarra
Y están sus ondas de triunfos, tejidas y entrelazadas
Con fibras de corazones y con jirones del alma.
lunes, 12 de julio de 2010
Coto real de caza
El pueblo o aldea ya debía de existir por aquella época. Una hipótesis posible es que algún grupo aislado de cristianos a salvo de la invasión musulmana de principios del siglo VIII se situase en esa comarca. De lo que sí estamos seguros es que las cacerías continuaron en los siglos posteriores.
Alfonso XI (1311-1348), rey de Castilla y León, nacido en Salamanca y que murió por causa de la peste negra, había sido un gran guerrero y cazador. En esta última faceta nos demostró ser buen conocedor de nuestra sierra, amén de otras zonas, incluyendo la de nuestro pueblo y sus alrededores. Tal es así que dejó escrito El libro de la montería, que ahora podemos leer gracias a varias ediciones recientes, entre las cuales cabe citar la efectuada por Ediciones Velázquez en el año 1976. Dentro del capítulo VIII, “De los montes de tierra de Salamanca, et de Miranda, et de Montemayor, et Bejar, et Gradadiella”, existe un apartado, “En tierra de Montemayor hay estos montes” que es el que a nosotros nos interesa y del que seguidamente citaré algunos párrafos:
La Xara
Val de Castañar, et Covatiella, que está entre
La Dehesa
La Dehesa
Los Pedrosos, que están sobre las viñas de Montemayor, es buen monte de oso en la otoñada, et en el ivierno. Et son las vocerías las sobredichas del monte de Val Escoboso, et las armadas esas mesmas; pero ha menester otra vocería por cima de Val de Aparicio fasta la carrera que va de VALDELAXEBE a Laguniella: et dende por la carrera fasta VALDELAXEBE.
La Garganta
El Barrejo, que está en par del vado, et
Val de Trosiello es buen monte de oso en la otoñada, et en el ivierno. Et son las vocerías la una por cima de la cumbre de XERGON fasta en par de Laguniella; et la otra por cima de
* Vocerías: lugares donde se colocan los ojeadores ante el posible paso de las reses para desviarlas a las puertas.
(Fotos: Juan-Miguel Montero Barrado)
Versos molineros
no vengas de noche a verme,
que estoy sola en el molino
y nos murmura la gente.
Si vienes a mi molino
solita te moleré;
si vienes a mi molino
yo no te maquilaré.
Vente conmigo a la fuente
que está detrás del molino
y al son del agua que corre
háblame de tu cariño.
Esta noche voy a ir
al molino, molinera,
a ver a una niña rubia
que en el molino se queda.
(Foto: Juan-Miguel Montero Barrado)
martes, 6 de julio de 2010
Pueblito, mi pueblo
extraño tus tardes,
querido pueblito,
no puedo olvidarte.
Cuanta nostalgia ceñida
tengo en el alma esta tarde,
hoy si pudiera otra vez,
bajo tus sauces llorar.
viendo las nubes que pasan.
Ah, ay y cuando el sol ya se va,
sentir la brisa al pasar,
fragante por los azahares.
Pueblito, mi pueblo
extraño tus tardes,
querido pueblito,
no puedo olvidarte,
querido pueblito,
no puedo olvidarte.
(Foto de Kraus, cedida por la familia del cantante; foto de Valdelageve, de Juan-Miguel Montero Barrado)