Increíble, pero cierto. El párroco que atiende a mi pueblo, Valdelageve, siempre estuvo cargado de otros municipios. Ha sido algo muy normal, pero tanto como ahora… Fíjense: según el periódico La Gaceta Regional de Salamanca, con fecha domingo 21 de julio de 2024, el actual párroco, don Gabriel Alberto Jaramillo Vargas, natural de Colombia, tiene a su cargo los siguientes:
Miranda del Castañar, Cepeda, Sotoserrano, Herguijuela de la Sierra, Madroñal, Monforte de la Sierra, El Cerro, Lagunilla, Valdelageve, Montemayor del Río y Peñacaballera. En total son 11 los que están a su disposición.
Son muchos los kilómetros a recorrer, con sus
respectivas curvas, amén del peligro de ir pendiente de todo el trabajo y las atenciones
que las parroquias y feligreses requieren.
Están las misas de sábados, domingos y fiestas
de guardar; los nacimientos, bautismos, comuniones y extremaunciones; las bodas
y fiestas patronales… Todos estos actos litúrgicos los englobaría en
actividades adulto-infanto-adolestente-juveniles.
Pero también están las defunciones: primero, con
los actos preliminares; luego, los in
situ; y, finalmente, todo lo que conlleva
a posteriori, incluidas las misas
anuales.
Las fábricas hay que cuidarlas y atenderlas a todos
los niveles. Aunque hay feligreses que están pendientes de todo lo que a ello
respecta, siempre existen casos por resolver.
Hay que estar pendiente de todo lo que a la
Casa Parroquial respecta, como el control y puesta al día de todos los libros
en los que van inscritos los acontecimientos habidos en la extensa Comunidad
Cristiana. También están las arduas
preparaciones para cualquiera de los actos públicos ya mencionados con
anterioridad y que son muchos. Y sin que falte la atención a la feligresía,
tanto presencial como telefónicamente.
No solamente debe ser una gran persona y estar
lleno de amplias virtudes, sino que también debe estar rodeado de una gran
fuerza física, mental y espiritual, ya que, sin ello, una grandísima fe no
sería capaz de llevar a cabo una labor tan cristiana y a la vez humana.
A mí solamente con escribir estas cuatro
líneas la cabeza me está haciendo chiribitas, así que ¿cómo la tendrá nuestro
querido y admirado don Gabriel Alberto?
(Fotografías: 1, La Gaceta Regional de Salamanca; 2, Juan-Miguel Montero Barrado).